¿Cuál es la mejor iluminación para un taller de trabajo?
La iluminación en un taller es un aspecto clave para el buen desempeño de una actividad. Aunque exista luz natural, debe estar provisto de elementos que garanticen una adecuada visibilidad y comodidad para el trabajador sea cuales sean las condiciones exteriores.
Además, normalmente, la iluminación va ligada a la eficiencia y fiabilidad de un profesional. Si quieres trabajar en un taller con las máximas prestaciones y seguridad, presta atención. A continuación, te daremos algunos consejos sobre ello.
Iluminación en un taller: Ejemplos según tu profesión
Tabla de contenido
Antes de pasar a mostrar las recomendaciones que existen sobre iluminación para taller en función de las diferentes profesiones del mercado, es preciso aclarar que no todas las zonas tienen las mismas necesidades. Es decir, cada lugar del taller, según el trabajo que se realice en él, tendrá unas necesidades más exigentes o menos.
Por otro lado, el color es otro de los elementos a considerar a la hora de decidir cuál es la mejor iluminación para un taller. Sea como sea, es necesario que la luz no deslumbre a los profesionales, no parpadee y no sea un elemento que dé cabida a errores.
Iluminación en un taller mecánico
La iluminación en un taller de estas características debe ser uniforme y estar dispuesta de tal forma que no se formen zonas de sombra. Esto dificulta mucho el trabajo.
Te recomendamos analizar las necesidades de cada zona del taller, pues no será la misma luz la que necesite el personal de recepción que el personal de almacén. En este sentido, la iluminación en un taller mecánico podría ser la siguiente:
- Oficinas y recepción. En el primer caso se requiere una iluminación de 500 lux, así el personal que trabaje frente al ordenador podrá desempeñar su trabajo cómodamente. En el segundo, hablamos de una iluminación de 300 a 600 lux.
- Áreas de trabajo. Nos referimos a la zona donde se reparan los vehículos. Aquí la iluminación es más exigente, pues cualquier error en una reparación puede salir caro. Se recomienda contar con entre 750 y 1200 lux.
- Fosos. Es fundamental que en estas zonas existan sistemas que permitan al profesional tener las manos libres. A su vez, deben apuntar hacia los bajos del coche.
- Almacenes. Con 150 lux es suficiente. Además, se puede apagar cuando no haya nadie.
Iluminación en un taller de carpintero
De nuevo, necesitamos que la iluminación en un taller de carpintería sea uniforme, sin destellos y precisa. Este trabajo es minucioso y cualquier detalle hace que las piezas no encajen, por lo tanto es necesario seguir estas recomendaciones.
Lo ideal es equipar al taller de tubos fluorescentes. Y, al mismo tiempo, disponer de dispositivos que proyecten luz de forma directa sobre máquinas o bancos de trabajo. Destacamos que, igual que en el caso anterior, el lugar de trabajo debería tener una luminosidad de entre 750 y 1200 lux.
Iluminación en un taller de pintura
Un taller de pintura de coches, de muebles o de cualquier otro uso, requiere de una iluminación especial. Incluso si hablamos de rotular una furgoneta. Esta debe asegurar la seguridad y el desempeño del trabajo. Recordamos que cualquier sombra en la cabina de pintura y en lo que se esté pintando puede afectar al resultado final.
Lo más adecuado en estos casos es apostar por la tecnología LED. Si hablamos de niveles, se exigen al menos 750 luxes. Solo así se logra máxima precisión. Aún así, cuando el trabajo requiere más exactitud, por ejemplo, para los acabados, se recomienda utilizar una iluminación de 1000 luxes.
La iluminación en un taller de pintura influye de manera directa en la satisfacción del cliente, pues un error puede estropear todo el trabajo. En líneas generales, la iluminación de taller no varía mucho en función del trabajo que se desempeñe. Pero es necesario aclarar las diferentes consideraciones a tener en cuenta.
Esperamos que esta información te sirva para aportar la luz necesaria en tu taller móvil o taller fijo.